Mamalhuaztle / Sergio Labrada Rodríguez.

El equívoco viene desde las primeras lecturas o versiones que se hicieron de algunos relatos o códices mexicanos, cuando alguien al traducir la voz Tlahuiztlampa asumió que al ser el rumbo por donde sale el sol, eso querría decir. Efectivamente por el oriente sale. Pero ni el sol, ni que salga por allí; tienen que ver con la voz Tlahuiztlampa.
Como a continuación se puede ver:
Tlahuia.- Resplandor, alba.
Huitz- espina.
Tlampan.- rumbo, lugar.
Tlahuiztlampa: o sea el rumbo de la estrella del alba.
(Léase también: Venus matutino. )
Tlahuiztlampantecuhtli el señor del rumbo es Quetzalcóatl, el cual procede los siguientes vocablos:
Quetzalli- hermoso.
coatl; cuate.- gemelo.
Su significado completo es: el hermoso gemelo de Xólotl.
(Léase también como Venus vespertino.)
No es que se relacione con Quetzalcóatl, él es el todo; origen del rumbo ahora. Durante mucho tiempo la mayoría de los danzantes y amantes de la mexicanidad lo han cantado así; “¡Tlahuiztlampa; lugar por donde sale el sol!” Sin saber (como muchas de las cosas que decimos en náhuatl) si quieren decir eso.
Por eso mismo, ahora que algunos ya lo sabemos queremos cambiarle el nombre al rumbo y decimos: Tlaneztlampa ¿Casa de Tlaneztlampantecuhtli? ¡No, no, no!
Es tratar de encontrar una voz en náhuatl para una traducción “Lugar por donde sale el sol”. Que por estar equivocada no corresponde con el concepto de la palabra Tlahuiztlampa.
Resumiendo la correspondencia correcta sería: Tlahuiztlampan.-Rumbo de la estrella del alba; ompa Tonatiuh ikizayan.- por allá sale el sol. Sabemos que por el oriente amanece o sale el sol, pero antes del amanecer aparece la estrella del oriente, Quetzalcóatl.
Quetzalcóatl fue antes que el sol en la genealogía cosmogónica y así se manifiesta en el cielo. Antes del culto a Huitzilopochtli ya se adoraba (adorar.- Dar ofrendas, regalos) a Quetzalcóatl, pero con la dominación Tenochca se igualó su jerarquía; más no ocurrió lo mismo entre los herederos del Tollan: los Texcocanos.
Quizá; ahora comprendamos lo que nos decían entre letras los de antes, «Estrella del oriente que nos da su santa luz ya es hora que sigamos al camino de la cruz» ¡ya es hora que volvamos al camino de la cruz de Quetzalcóatl! Y no habla de la cruz católica porque no puedes volver a donde siempre has estado conchero. La consigna es aprender náhuatl para saber que carajos estamos diciendo y poner atención a lo que dejaron los denantes.
“Basta una sola imagen para derrotar a alguien, una sola palabra para motivar a un campeón, un solo roce para sentir ternura, un solo aroma para despertar la pasión y un solo beso para volverse loco.”